Los científicos tienen una herramienta súper genial que les permite leer sobre el agua. Se llama medidor de conductividad, y es como tener una herramienta especial que te ayuda a ver qué tan bien fluye la electricidad en los líquidos.
¿Y si tuvieras una varita mágica que te contara secretos sobre el agua? ¡Eso es lo que hace un medidor de conductividad! Así que, esta herramienta especial se usa para estudiar algo que es muy importante para los científicos, que es cómo se mueven las partes cargadas en el agua. Estas pequeñas piezas son tan diminutas que no podemos verlas, pero ayudan mucho a la electricidad y hacen que fluya más fácilmente.
Considera la electricidad como agua que fluye en un tubo. Algunas de las tuberías permiten que el agua fluya bien, y otras resisten el flujo. El medidor de conductividad hace con la electricidad lo que el medidor de pH hace con los iones químicos en el agua. La electricidad puede moverse a gran velocidad cuando hay muchos pequeños bits cargados en el agua. Si solo hay unos pocos componentes cargados, la electricidad tiene que hacer un esfuerzo adicional para moverse.
→ Los científicos están ajustando el agua, el agua tratada que entra. Utilizan el medidor de conductividad como un detective del agua. El medidor les ayuda a determinar si el agua contiene demasiados materiales extraños suspendidos que no deberían estar allí.
Los medidores de conductividad no son todos iguales. Algunos son grandes, otros pequeños. Algunos pueden medir un frasco de agua, y otros pueden medir un barril de agua. Diferentes científicos usan el medidor, que funciona en su trabajo especial.
Sacando el botón de la izquierda, ponemos el medidor de conductividad en uso, lo cual puede ayudar a mantener a las personas seguras. Los científicos pueden determinar si el agua es segura para beber midiendo la forma en que la electricidad fluye a través de ella. ¡También actúa como un superhéroe y nos protege del agua que nos enfermaría!
Un medidor de conductividad ayuda a los científicos a interpretar cada pequeño sorbo de agua, la historia que cada gota tiene que contar. Demuestra la naturaleza única y compleja del agua.